Y volver, volver, volver...

Han pasado cuatro años desde que te conocí, y hace exactamente un mes he regresado al camino donde alguna vez me perdí buscando una palabra tuya, una respuesta y un porque a tus ineludibles dudas (dudas que hasta el día de hoy se han reducido notablemente), he caminado y he encontrado en el desierto de lo extraño refugios de tranquilidad, esa paz de la que soy fastidiosamente fanático. Ciertamente encontré un gran refugio que durante mucho tiempo me lleno de paz y saco de mi cabeza la idea de volver aquel infierno sofocante donde me abandonaste y al cual jure no regresar jamás, pero las palabras al igual que mis promesas se las llevo el viento, y es que no te voy a negar que te olvide por completo- al menos eso pensé- y aprendí mucho mientras me guarecía en aquel calido refugio, ¿que paso? Pues las tormentas de arena que provoque desde adentro la ahuyentaron, la llevaron lejos de mí, se que no quieres saber que fue lo que paso detalladamente y yo pretendo guardar muy bien el secreto, no me gusta hablar de mi pasado, nunca me ha gustado hacerlo pues no me gusta mostrar las heridas abiertas de mi juventud maltrecha (Aunque últimamente por alguna extraña razón he venido divulgando mi pasado de manera indiscriminada). Te he encontrado nuevamente y he sabido con tus miradas y tus sonrisas que hay algo dentro de mí que empieza a renacer, y es que cuando me miras y me sonríes de la forma en que lo haces me dejas como un tetelemqeue, totalmente pasmado, como hipnotizado y yo con una evidente e insoportable cara de tonto enamorado solo atino a perderme en tu voz, a buscarte en mis recuerdos mas recientes y a tomarte fotos con mi celular, como un pánfilo, pero por favor no te enojes si lo hago, lo hago por que siento que es la única manera de no olvidarte jamás, así a falta de una imagen tuya en mi carcomida memoria, si es que nuevamente te vas, tendré muchas imágenes con las cuales será imposible olvidarte. Hay quienes están en contra de esto, chismes de urracas viciosillas pululando por allí de manera escalofriante, sabes también que la nuestra es una historia un poco tragicómica, por como se han ido dando las cosas, hay algunos que nos miraran y se harán una imagen de nosotros –tal vez comiquisima, porque siempre lo fuimos, a fin de cuentas. sabes además que estar a mi lado se ha vuelto una tarea difícil (por mi bipolarizada personalidad) que estas sobrellevando con esa paciencia que nunca te caracterizo y que hoy admiro, me has sorprendido, pero me pregunto que tendría de bueno un personaje de mala reputación como yo, como dice "P" que soy un reverendo pendejo,hipócrita, patan,un bicho rastrero, la verdad no se si será del todo cierto pero por algo lo debe decir, lo único cierto es que hoy a pesar de que estas aquí con migo y seguramente no te veré mas tarde, quiero darte gracias, por toda la paciencia que has sabido tenerme, por haberle dado nuevamente un respiro a mi cardiaco corazón, no se cuanto dure esta agridulce historia ya sabes que nada nunca dura para siempre y de eso estoy totalmente convencido, pero por mero capricho voy a pensar suavemente que el destino no me pateara el trasero tan burlonamente como lo viene haciendo y que tu estarás a mi lado mas de lo que imagino, que me miraras con esa picardia e inocencia que solo tienen las chicas bobaliconas y que me diras que no te iras, aunque ya sabemos que eso pasara inevitablemente. Te quiero demasiado tontita.